1. Ambientación

Antes de iniciar el encuentro, el animador de la comunidad juvenil le entregará a los jóvenes
un hija dividida en 2, la primera mitad nombrada: “servicios a los que diría SI”, y la segunda:
“servicios a los que diría NO”. El animador de la comunidad hará una lista a con servicios
como: visitar a los enfermos de un hospital, ir a evangelizar a la cárcel, visitar niños enfermos.
Limpiar los baños de la casa de retiro mientras la usamos, lavar los plastos después de una
cena familiar, coordinar el retiro de la comunidad, ser Jesús en el viacrucis, sacar la basura,
etc. (Pensar en actos de servicio que involucren todas las realidades de los jóvenes). Cada
integrante de la comunidad escribirá en su hoja, de manera personal, cuales servicios diría SI
y a cuáles diría NO.

1.1. Oración inicial
Para iniciar nuestro invocamos a la Santísima Trinidad, dando gracias a Dios por tu vida,
por tu familia, por la comunidad juvenil y por la oportunidad de reunirnos una vez más.
Cierra la oración con un Padre Nuestro, un Ave María y un Gloria

2. Leamos la palabra y meditemos

Busca tu Biblia y lee Genesis 22, 15-18; lee minuciosamente el texto, enfocando tu atención
en cada palabra, personaje y escenario, para interiorizar y comprender mejor su sentido.
Desde el cielo, el ángel del Señor volvió a gritar a Abrahán: –Juro por mí mismo –oráculo
del Señor–: Por haber obrado así, por no haberte reservado tu hijo, tu hijo único, te bendeciré,
multiplicaré a tus descendientes como las estrellas del cielo y como la arena de la playa. Tus
descendientes conquistarán las ciudades de sus enemigos. Todos los pueblos del mundo se
bendecirán nombrando a tu descendencia, porque me has obedecido.

PALABRA DE DIOS

2.1. Dialoguemos sobre lo que dice la Palabra de Dios.

A continuación, el animador motivará a los miembros de la comunidad a, de forma
voluntaria, responder las siguientes preguntas:

  • ¿Comprendo el regalo de Dios a Abraham por no negarse a ofrendarle a su hijo único?
  • ¿He sido obediente a Dios como Abrahán?

2.2. Interioricemos con la Palabra

En la intimidad de su corazón, cada integrante de la comunidad va a reflexionar entorno a las
siguientes preguntas:

  • ¿Nos estamos dando sin medida en el servicio a Dios y a nuestros hermanos?
  • ¿Por qué no me entrego sin medida?
  • ¿Te has reservado lo que Dios te ha dado?

2.3. Actividad

Retomando la actividad inicial. Compartirán el comunidad, en ambiente de confianza y
respeto, sus respuestas; intentaran hacer compromisos personales y en comunidad respecto a
afrontar esas situaciones a las cuales han dicho que NO.

3. El Papa Francisco nos enseña

Hay una voz que de improviso resuena en la vida de Abraham. Una voz que le invita a
emprender un camino que suena absurdo: una voz que le incita a desarraigarse de su patria,
de las raíces de su familia, para ir hacia un futuro nuevo, un futuro diferente. Y todo sobre la
base de una promesa, de la que sólo hay que fiarse. Y fiarse de una promesa no es fácil, hace
falta valor. Y Abraham se fio. Escucha la voz de Dios y se fía de su palabra. Esto es
importante: se fía de la palabra de Dios. Y con esta partida nace una nueva forma de concebir
la relación con Dios; es por eso por lo que el patriarca Abraham está presente en las grandes
tradiciones espirituales judía, cristiana e islámica como el perfecto hombre de Dios, capaz de
someterse a Él, incluso cuando su voluntad es difícil, sino incluso incomprensible.

-Papa Francisco, Audiencia General, Miércoles 3 de junio de 202.

4. Compromiso

4.1.Privado: Recuerda los compromisos realizados en el punto 2.3.

4.2. #RetoSemanalPJ: Comparte en redes sociales una invitación a servir, desde cada
una de nuestras realidades, a hacer actos de servicios en pro de ayudar a nuestra
comunidad a crecer.

5. Oración final
El coordinador asignará a un joven de la comunidad para que se encargue de dirigir una
oración espontánea a la luz de lo aprendido en el presente encuentro.